LA TIERRA DONDE HAS DE MORIR

Libro VI de la Leyenda de Jhuno

Capítulo XI: La danza de la espada

—¿Quién es el maestro de la espada que ha de enfrentarse conmigo?

—Lo ignoro, en China hay cientos, por no decir miles de maestros de la espada, pero si el emperador te quiere muerto, seguramente habrá mandado llamar al mejor, con mucho, de todos ellos.

—¿Quién es el mejor?

—Li Shun, sin duda alguna.

—¿Lo has visto luchar?

—Solo en una ocasión, era un combate de exhibición ante el emperador, no creo que se empleara a fondo. Pero se cuentan de él muchas cosas, algunas supongo que verdaderas, otras serán seguramente exageradas. Lo más significativo es que pese a ser un maestro de la espada, no se jacta de ello y mucho menos lo parece. Me refiero a que no viste ostentosamente, casi parece un mendigo. Un hombre sencillo, vamos.

—¿Qué edad podrá tener?

—Yo diría que, como treinta y dos años, pero nadie lo sabe a ciencia cierta. Si se lo que me vas a decir, es muy joven para ser el mejor, pero créeme, lo es.

—¿Cómo usa la espada?

—Veras Jhuno, tú sabes cómo maneja la espada un samurai. La espada del samurai es un arma para usar indistintamente con una o con las dos manos, no deja de ser un sable, con un sólo filo. El uso de una espada así, marca mucho la forma de luchar con ella, tú has visto, según me has contado, combates, especialmente has visto al mejor, a Hayato. Pues los maestros de la espada chinos usan la espada de dos filos, recta, con una sola mano. Su espada no es tan resistente como una katana, no parara tu golpe en seco, se podría partir, te lo desviara y te contraatacara en un sólo movimiento. ¿Te acuerdas de los movimientos de los pies del samurai cuando lucha?, pues los maestros de la espada, digamos bailan con la espada, realizan una danza, pero eso es para estar siempre equilibrados, con el punto de gravedad lo más bajo posible, lo que les da más estabilidad. No te fíes, no es una danza en sí misma, aunque te lo parezca, es una auténtica destreza con la espada.